FIN DEL CAMINO
Inicio: Corcubión
Fin: Faro de Fisterra
Distancia: 14 km
Tiempo aproximado: 4 h
Dificultad: Media
DESCRIPCIÓN:
El Cabo Finisterre fue el término de la antiguas peregrinaciones a un imaginario "fin de la tierra", y en torno a este surgieron numerosas leyendas.
Comenzaremos nuestra ruta saliendo de Corcubión. Este municipio se caracteriza por sus casas nobles y su arquitectura popular marinera. En ella podéis visitar la casa de Miñones, el Pazo de los condes de Altamira, el castillo de Cardenal. En el núcleo de la ciudad se encuentra la iglesia de San Marcos, de estilos románico y gótico marinero y del siglo XII, y la capilla del Pilar, que hoy en día ese un auditorio municipal.
Partimos desde el parque de Campo do Rollo y, detrás de una escuela, tomamos un sendero que sube al pueblo de Vilar siguiendo una pista de asfalto a la derecha. Cruzaremos la carretera provincial AC-445, pasando delante del albergue de peregrinos del Alto de San Roque. A la altura de la aldea de A Amarela, volvemos a salir a la misma carretera provincial, y la seguiremos hasta llegar a Sardiñeiro. Cruzaremos la mitad del pueblo siguiendo la carretera, hasta tomar a una calle, a mano derecha, en dirección a la Playa del Rostro. Continuaremos por una pista de tierra por un tramo rodeados de eucaliptos y pinos para volver a salir a la carretera provincial, a la altura de un mirador, y luego seguir por un sendero a la izquierda que aparentemente conduce a la cala de Talón. Este nos llevará de nuevo a la carretera y, a 400 m, tomaremos el camino de la izquierda que nos lleva a la Playa de la Langosteira. El camino discurre tras las dunas, en un agradable camino de pizarra, bien cuidado, que lleva hasta el mismo centro del pueblo de Fisterra. Aquí, cabe destacar la iglesia de Santa María das Areas, del siglo XII y origen románico. Para llegar al Faro, salimos por delante de la iglesia. El tramo final discurre a través de una pista en tierra y piedra, paralela a la carretera. A media subida vemos a la izquierda un curioso y original cementario formado por subos metálicos orientados hacia el mar.
Una vez en el faro, podremos contemplar la majestuosidad del Océano Atlántico, con su fuerte oleaje rompiendo en los acantilados, y la vista panorámica de la costa.
El faro es del siglo XIX y se encuentra en el Cabo Finisterre el cual, hasta no hace muchos años, era considerado el extremo más occidental de la península ibérica, pero mediciones más precisas comprobaron que el Cabo de Touriñán, en Galicia, y otro en Portugal, son más occidentales.
Fin: Faro de Fisterra
Distancia: 14 km
Tiempo aproximado: 4 h
Dificultad: Media
DESCRIPCIÓN:
El Cabo Finisterre fue el término de la antiguas peregrinaciones a un imaginario "fin de la tierra", y en torno a este surgieron numerosas leyendas.
Comenzaremos nuestra ruta saliendo de Corcubión. Este municipio se caracteriza por sus casas nobles y su arquitectura popular marinera. En ella podéis visitar la casa de Miñones, el Pazo de los condes de Altamira, el castillo de Cardenal. En el núcleo de la ciudad se encuentra la iglesia de San Marcos, de estilos románico y gótico marinero y del siglo XII, y la capilla del Pilar, que hoy en día ese un auditorio municipal.
Partimos desde el parque de Campo do Rollo y, detrás de una escuela, tomamos un sendero que sube al pueblo de Vilar siguiendo una pista de asfalto a la derecha. Cruzaremos la carretera provincial AC-445, pasando delante del albergue de peregrinos del Alto de San Roque. A la altura de la aldea de A Amarela, volvemos a salir a la misma carretera provincial, y la seguiremos hasta llegar a Sardiñeiro. Cruzaremos la mitad del pueblo siguiendo la carretera, hasta tomar a una calle, a mano derecha, en dirección a la Playa del Rostro. Continuaremos por una pista de tierra por un tramo rodeados de eucaliptos y pinos para volver a salir a la carretera provincial, a la altura de un mirador, y luego seguir por un sendero a la izquierda que aparentemente conduce a la cala de Talón. Este nos llevará de nuevo a la carretera y, a 400 m, tomaremos el camino de la izquierda que nos lleva a la Playa de la Langosteira. El camino discurre tras las dunas, en un agradable camino de pizarra, bien cuidado, que lleva hasta el mismo centro del pueblo de Fisterra. Aquí, cabe destacar la iglesia de Santa María das Areas, del siglo XII y origen románico. Para llegar al Faro, salimos por delante de la iglesia. El tramo final discurre a través de una pista en tierra y piedra, paralela a la carretera. A media subida vemos a la izquierda un curioso y original cementario formado por subos metálicos orientados hacia el mar.
Una vez en el faro, podremos contemplar la majestuosidad del Océano Atlántico, con su fuerte oleaje rompiendo en los acantilados, y la vista panorámica de la costa.
El faro es del siglo XIX y se encuentra en el Cabo Finisterre el cual, hasta no hace muchos años, era considerado el extremo más occidental de la península ibérica, pero mediciones más precisas comprobaron que el Cabo de Touriñán, en Galicia, y otro en Portugal, son más occidentales.